UN RELOJ DE PARED MUY POCO COMÚN
Lo primero que vamos a decir es que hay varios tipos de relojes de pared que queremos enseñaros, de distintos materiales y diferentes acabados. Cada uno es único.
Empezamos con un reloj muy sencillo. Lo único que tenemos que hacer aquí es comprar una madera (la que más nos guste) y tener claro si queremos un reloj más grande o más pequeño de eso dependerá el tamaño de la madera. Al comprarla, normalmente, nos la venderán cuadrada. Esto no es problema ya que muchos relojes son así, así que podemos dejarlo así o dibujar una esfera con una cuerda y tiza, para posteriormente cortar y lijar. El punto donde nos apoyemos será el centro del reloj donde haremos un agujero para después introducir las agujas con el mecanismo del reloj.
Si se nos da bien la pintura podemos dibujar nosotros mismos los números o cortar la madera.
El segundo reloj que os vamos a enseñar es un reloj que se hace usando diferentes maderas.
Podemos hacerlo de dos maneras: la primera dejando un breve espacio entre lámina y lámina o de la segunda manera sin dejar espacio.
El procedimiento viene a ser lo mismo que en el reloj anterior.
En el primer caso (donde dejamos un breve espacio entre lamina y lamina), poniendo la cara que queremos que se vea boca abajo, se mide delicadamente el espacio a dejar y situamos las maderas. Tras esto (sujetando las láminas para que no se muevan) añadiremos un par de láminas que pegaremos con cola de contacto wolfpack, aunque nos vale cualquier cola que pegue bien maderas. Dejaremos bastante hueco entre ambas láminas para que quepa el mecanismo en el centro.
Por último dejamos secar y ponemos el mecanismo y voilà tenemos nuestro perfecto reloj.
En el segundo caso se hace igual que el anterior pero pegamos las láminas entre ellas con cola de contacto wolfpack y añadimos después las láminas por detrás. Dejando, no nos olvidemos, el espacio para el mecanismo.
El tercero que vamos a ver es el típico reloj de propileno pegado a la pared directamente, si no queremos gastarnos dinero en él, ya que son la mayoría parecidos y monótonos, podemos hacerlo con diferentes colores o con los números en romano. Igualmente se pegara a la pared con la cola de contacto wolfpack que es una de las más universales que hay.
Aquí os dejo algunas ideas para que veáis los chulos que pueden quedar.
También podéis hacerlo con piezas de acero de decoración.
Como podéis ver solo hay algunas ideas, así que a dar rienda suelta a vuestra imaginación y crear unos relojes divertidos y originales.
Mucho ánimo y a disfrutar como un gran bicoferretero.